martes, 14 de mayo de 2013

Para dejarlo acabar...


Y que acabe como acabe, y que pase lo que pase. Que después de la tormenta siempre llega la calma, o eso dicen. Que la vida no es felicidad, que la vida es un camino de hostias. Y si tienes un mal día, un mal día vas a seguir teniendo. Que no todo va a salir bien y que todo se va a acabar. Que te calientas un café para dejarlo enfriar y empiezas algo para terminarlo. No importa la manera, no importan las personas, no importa el lugar, ni la hora. No importa nada porque nada va a ser como tú pensabas.
¿Y ahora cómo debo actuar? Que yo no sé si reír o llorar. Si relajarme o explotar. Que yo ya no entiendo nada.

lunes, 6 de mayo de 2013

I need you.

Yo no tengo miedo a nada. (Qué mentira). A mí no me dan miedo las motos, ni los animales grandes, ni el último tren que va a marcharse y sé que voy a perder.
Mi miedo se esfumó como la última calada de un cigarrillo. Como la última gota de café que al caer en un vaso hace un ruido estruendo en medio de la soledad. Mi miedo era perderte:
-Y ya ves, tú te has marchado.
¿Ahora a qué debo tenerlo? Nada va a poder conmigo. Hasta reconocerlo duele:
-Después de todo, joder. Tú me has hecho más fuerte.

martes, 30 de abril de 2013

Zoraida.

Dos años hace hoy desde que te fuiste. Desque que desgraciadamente nos dejaste. Hoy hace dos años que no te vemos si no es en fotos. Todos te echamos de menos ¿y sabes? Aunque parezca mentira pienso en ti todos los días. Nunca voy a olvidarme de ti, de cuando éramos pequeñas y siempre lo pasábamos bien. De las excursiones, de Polientes, de cuando nos intercambiábamos ropa. Yo sé que donde estés nos ves a todos y nos deseas lo mejor. Nos duele mucho tu ausencia. Si se pudiese retroceder el tiempo... si volvieses con nosotros...
Y lloro. Lloro al recordarte. Lloro al pensar que nunca más volverás a estar en cuerpo presente con nosotros. Lloro al ver tus fotos y las canciones que tú me enseñaste. Lloro al pensar en nuestros momentos. Lloro al llevarte flores. Lloro al escribirte esto que sé que nunca leerás. Lloro. Lloro por tí.
Sonrío. Sonrío al recordarte. Sonrío al pensar que 7 años los pasamos juntas. Sonrío al ver tus fotos y las canciones que me descubriste. Sonrío al pensar nuestros momentos. Sonrío al llevarte flores porque siento que te tengo cerca. Sonrísa triste pero no forzada. Sonrío. Sonrío por nosotras.

lunes, 15 de abril de 2013

Buena vida, mi amor.

¿Sabes? estoy muy feliz y la razón es que esta historia está siendo la mejor del mundo y va viento en popa. Quiero tener toda una vida contigo, poder hacerte feliz a la vez que me lo haces tú a mí como hasta ahora, y que nos riamos por cualquier tontería. Que vayamos de la mano a todas partes y te pares en mitad de cualquier lado para abrazarme y darme un beso. Quiero estar en cualquier lado y que vengas por detrás para agarrarme de la cintura y besarme el cuello. Quiero gustarte todos los días y de todas las formas, despeinada, sin maquillar, de mal humor, dormida, despierta, alegre, llorando. Y que si me ves llorando me seques las lágrimas. Así que ya sabes, sigue cuidándome como lo haces, sigue acurrucándote a mi lado y haz que nunca se me borre la sonrisa cuando te vea aparecer.

jueves, 21 de marzo de 2013

Música.

No es sólo una palabra. Música es sentir, que se te pongan los pelos de punta. Ver como cada nota de cierta canción te recorre el cuerpo haciéndote sentir un escalofrío. Música es vida. Respirar. Sentirte vivo. Música son personas, momentos, lugares. Me gusta sentir todo eso y me llena de orgullo hacérselo sentir a la demás gente que va a verme y me apoya.
Recibir los aplausos de la gente te llena tanto por dentro... bajar de un escenario y recibir felicitaciones, que te digan lo bien que lo has hecho, lo bien que cantas... y no es solo eso: ver las sonrisas de la gente al decirte esas cosas, te llena de felicidad.

¿Qué tendrás?

No sé si es tu físico, tu manera de ser, un conjunto de las dos cosas, o quizás tengas otra cosa que me haga sentir tan bien cuando estoy contigo. Todo es tan extraño... siento que te quiero, pero podría quererte más. Y también menos, claro está. Gracias por hacerme sonreir en todo momento, con cada gesto o palabra. Eres muy importante para mí.

martes, 19 de marzo de 2013

Amistad.

Amistad. Démosle la vuelta: datsima. Cambiémosle solo el principio: máxima.
La amistad es donde vas a encontrar la máxima alegría,  la máxima felicidad, donde vas a sacar la máxima sonrisa. La amistad no es ningún juego, y si así es como te lo quieres tomar, adelante. Solo tienes dos maneras de salir: ganando o perdiendo.
¿Qué sentirías al perder a tus grandes amigos? ¿A quién le contarías las cosas tan abiertamente y quien te respondería de la manera que ellos lo hacen? En esta vida hay que aprender a valorar las grandes cosas y una de ellas son esas personas que hacen tus días más amenos, que saben el momento en el que estás mal hasta cuando estás de espalda. Los que no permiten que se te acumulen lágrimas dentro de los ojos y te eches a llorar.  Son los que cuando te ven mal te sueltan un: ‘¿a quién hay que pegar?’.  A nosotros. A los que no apreciamos lo que tenemos en las manos y  sin querer llega un día en el que perdemos lo que más falta nos hace. Los amigos.